https://www.youtube.com/watch?v=CrDG1gI2ois
Cada imperio tiene sus herejes.
Los que se salen del paradigma dominante, los que se atreven a pensar diferente
de lo que el Imperio ordena.
En una sociedad libre, se llama
ciudadanos ejerciendo su libertad de expresión.
En las sociedades totalitarias,
son los herejes, son los que escandalizan a los creyentes.
En el episodio televisivo
protagonizado por Carlos hace unos días, se observa muy bien cómo los creyentes
expelen ignorancia y burla al mismo tiempo ante el paradigma alternativo que son
incapaces de comprender. La burla y el desprecio es, obviamente, todo lo que
les queda.
Carlos, tranquilo, firme,
valiente, respondía a las burlas sin burlas, a los insultos sin insultos, a las
estupideces con una racionalidad que los demás veían como ridícula. Para los
que conozcan historia de la ciencia, igual que los profesores aristotélicos que
se burlaron del telescopio de Galileo.
Doman -el único cuyo nombre voy a
decir, porque de los demás se dice el pecado pero no el pecador- comienza
explicando la gran noticia, el gran delito de Maslatón: ir a comer a
restaurantes. Prohibidos ahora por el dictador Alberto Fernández.
Esa es una de las primeras cosas
que dice Maslatón: desconoce la legitimidad moral y de ejercicio del nuevo
dictador.
Entonces la periodista, con
burla, con soberbia, con cara de que se las sabe todas, insiste en que si Alberto
fuera dictador, Maslatón no estaría lo más tranquilo en su casa, ignorando con
ello que lo que define a un dictador no es su mayor o menor crueldad, sino la
suspensión lisa y llana de la división de poderes y las garantías
constitucionales, como ahora sucede con un llamado presidente que gobierna con
decretos de necesidad y urgencia sin ningún tipo de control constitucional.
Pero ella se ríe, con cada de “yo soy la piola” (típica decadente argentina), lo
más feliz en su ignorancia.
Ella sigue con sus burlas, como
si refutaran algo. “Vas a ir a Carlos Paz no….?”
No es gracioso compañera, le
recuerda Maslatón. Y es verdad. La imposibilidad de llevar el sustento a tu
familia no es gracioso. Que te detengan por ejercer los derechos del art. 14 no
es gracioso. Que mucha gente se esté muriendo de otras enfermedades no
atendidas no es gracioso. Que los gobiernos difundan mentiras y pánico por lo
del Covid 19 no es gracioso. Pero allí está ella, lo más divertida, feliz en su
existencia inauténtica y su banalidad del mal.
Y finalmente, en el colmo de su
desprecio: “los dejo a ustedes, chicos. Me aburre”…………..
Maslatón no reacciona, no
insulta. Está en paz. Toda su respuesta es: “aburrite”.
Luego aparece el “periodista” A.
Repite el discurso del pánico ante el cual su cerebro no pudo defenderse. Si
propaga una enfermedad peligrosa, mortal…………………..
No es así, intenta explicarle
Maslatón, pero nada, obviamente. Los alienados, inmunes a la verdad. Eso sí que
es tener bien el sistema inmunológico.
Luego entra el B. Insiste en que
es “divertido” escucharlo, y qué mal que “le estemos dando lugar”. Toda una
definición. En el totalitarismo no hay lugar para el disidente. Toda una
definición. 10 en totalitarismo.
Y, por supuesto, para B las
intenciones del disidente son siempre perversas. ¿Qué quieres lograr con todo
esto, oh inmundo hereje????
Maslatón, incólume: si ustedes
(MUY bien al incluirlos como cómplices de la dictadura) creen que tienen el
derecho a detenerme, procedan.
Perfecto.
Y a continuación, para escándalo
de los inquisidores, la herejía total: propongo abrir todo inmediatamente,
liberar todas las actividades económicas…………….
Ay NO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
¡Cómo te atreves a decir eso!!!!!!!!!!!!!!!! ¡Que se rasguen los lienzos del
templo!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! ¡Que sea crucificado ¡!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
¡A los campos de concentración!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Y como si fuera poco: “Dejen de
inventar muertos”. ¡Oh negacionista!!!!!!!!!!!!!!!! ¡A la hoguera
ya!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Y frente a las reiteradas
invectivas de B, Maslatón (el caballero de la fe loca, diría Scciaca que Unamuno
dixit) sigue respondiendo con calma: yo no me dedico al periodismo, yo no hago
política (que lástima Carlos, porque si lo hicieras, devolverías a ambas
profesiones su dignidad) pero si me llaman yo contesto………………………..
A y B se ríen, y siguen: ¡a la
hoguera, a la hoguera!!!!!!!!!! Que lo metan preso ¡!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Y ella, la buena, la preocupada,
la socialmente responsable, hace la pregunta típica: “y si alguien se contagia y
se muere” (SIN saber que ese era el argumento de los inquisidores
medievales: ¿y si alguien se convence de la fe errada y herética”?????)
Maslatón la pone más loca de lo
que ya está: el que tenga miedo que se ponga en un frasco, la salud es responsabilidad
de cada uno.
Ella cierra su compu, mira para
todos lados, actúa bien su escándalo. ¡Horror, horror!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Ay ¡!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
¡Sáquenlo de aquí!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Pero él, como Don Quijote, como
los profetas, sigue diciendo la verdad: SON INCAPACES DE DISCREPAR CON LA DOCTRINA
OFICIAL DEL GOBIERNO.
Ella: “es un delincuente”. Claro,
genia ¡!!!!!!!!!!!!!!!! ¿No te acordás de que delincuente era el que opinaba
distinto de Videla????
El periodista D le pregunta: y si
todo el mundo hiciera lo que hacés vos, qué pasaría con la salud pública, presuponiendo,
claro, que el sistema inmunológico no funciona en las personas sanas, estupidez
médica enseñada ahora por médicos……………….
Pero Maslatón sigue incólume: “no
uso barbijo”.
Oh, hereje, hereje!!!!!!!!!!!!!!!!!!! No
te arrodillas ante tu señor!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! ¡No das culto al
emperador!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! ¡A los leones!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Y Maslatón sigue: yo no denuncio.
Ella sigue en su pulsión de Torquemada: habría que ver dónde estás…………….
Y el hereje: estoy en mi casa. Da
la dirección. Firme. Incólume. Valiente.
Pero además, su última clase a
los cómplices de la dictadura: ¿y por qué deberían aclarar que no están de
acuerdo conmigo? Ja ja precisamente para aclarar que son cómplices!!!!!
Y Doman le reconoce el punto.
¿Desde cuándo, pregunta el
hereje, el periodista tiene que aclarar que no está de acuerdo con el
entrevistado? Claro, cuando hay una dictadura vigilante…………………
“Hablá libremente Doman como
hablo yo”
Pero Doman no puede. Big brother watch. And big fear he
feels.
Y ella sigue. Es un show de
autoritarismo, habría que hacer con su discurso una tesis. “Es un
delincueeeeente…………….”
Pero el periodista A tampoco
puede con sí mismo. Una cosa es disentir y otra……………….. Claro, él marca cuál es
el límite, no?
La verdad estos 17 minutos son
una cabal muestra de lo peor del horizonte cultural argentino. Ahí los tienen.
Alberto Fernández es tan (…..) como el Cómodus de “Gladiador”. Pero el problema
son los pretores y el populos que lo obedecen. Perfectamente simbolizados en
estos “periodistas”.
Como te dije, Carlos, gracias por
existir. Que el Dios de Moisés, Isaak y Jacob te guarde, te proteja y te bendiga
para siempre.
8 comentarios:
No vivo en Argentina, Profesor. Sin embargo, ese encuentro del Sr. Maslatón que parece sacado de una comedia y las palabras que usted escribe son de una triste aplicación universal estos días.
Aplaudo indeciblemente su disidencia, cuanta tristeza me da la ausencia de más voces disidentes; son unas pocas que, además, son vehementemente categorizadas como inestables e inestabilizadores, locos, etc... Bien dicho "herejes"...
No se detenga, Dios lo bendiga.
Genial lectura de la genial intervención de Carlos.
El diálogo Zanotti-Maslatón es uno de los más interesantes del liberalismo argentino. De los pocos que son liberales por principio y que no temen ir en contra del positivismo materialista del mundo mainstream.
Cada uno desde su lugar y con sus diferencias, por supuesto.
Buen comentario, lástima la posición servil de quedar " políticamente correcta" con inexactitudes históricas sobre tres temas que aparentemente no domina:
a) ""(SIN saber que ese era el argumento de los inquisidores medievales""
b) ""¿No te acordás de que delincuente era el que opinaba distinto de Videla????""
c) ""Ella sigue en su pulsión de Torquemada""
Faltaría solamente algo sobre el "Holocuento" y estaría completo. A estudiar Historia verdadera por favor antes de hacer citas...
Buen comentario, lástima el querer quedar "políticamente correcta" o por ignorancia histórica agregar citas de acontecimientos falsos o imaginarios como:
a)""SIN saber que ese era el argumento de los inquisidores medievales""
b)""¿No te acordás de que delincuente era el que opinaba distinto de Videla????""
c)""Ella sigue en su pulsión de Torquemada""
Solamente falta algo sobre el " holocuento" y esta totalmente cubierta.
Vengo siguiendo a Carlos en sus pensamientos y publicaciones durante ya 5 o 6 años. Nunca comulgue completamente a sus postulados, no me quita esto decir que al ver en estas dos semanas las notas tanto en América como en en C5N a demostrado un temple para el debate, que más que un debate pareciera una clase de periodismo y conciencia por la individualidad que quitan las industrias de contenido periodístico televisivo invisibilizado en las posiciones de sus periodistas. Frases que nos deja Carlos siendo minimizado por las mismas personas que lo invitaron a postular sus ideales da cuenta la banalidad que logró el programa y lo que presenta.
Hace 5 o hasta 6 años que vengo siguiendo los pensamientos y postulados de Carlos. Aunque en casi ningún punto comulgue con sus ideales o hasta por momentos acciones no me ha de quitar el derecho a felicitarlo por sus acciones estas dos semanas. Tanto en C5N como en América a brindado una clase magistral de periodismo, solo y con temple para el debate demuestra a los periodistas inquisidores las formas que ha de tener un debate democrático. Lejos de las burlas y los insultos argumentando a cada palabra que da y brinda hace años ya demuestra la poca información por parte de los periodistas. Carlos demuestra y deja a la luz la perdida de la individualización por parte del periodismo industrial televisivo escondido en sus periodistas mediáticos. Carlos puede no ser una figura a la que quiera seguir, pero sus comentarios enseñando sobre periodismo básico a agentes de la colectivización social deberían dejar una huella en la televisión argentina. Como bien diría él, y el que no esté de acuerdo conmigo QUE PROCEDA.
Anónimo, no sé por qué te escandalizas. La Inquisición, Torquemada, etc., no fueron un ejemplo de libertad religiosa. Se los puede comprender en su momento, se los puede defender de versiones iluministas, pero son fueran santas cosas ni santas personas.
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