sábado, 22 de febrero de 2025

EL MISTERIO DEL LENGUAJE

 Esta semana estaba leyendo una versión bilingüe de los Prolegómenos, de Kant, y de repente tomé conciencia de algo que para muchos será obvio pero sabrán perdonar a este torpe filósofo para las lenguas, que se da cuenta tardíamente de cosas muy simples.

By the way sí, es otra oportunidad para confesar mi incapacidad para las lenguas, fruto de un trastorno de atención que no me permite tener la concentración necesaria para aprenderlas. Sólo hablo un nivel advance intermediate de Inglés y eso que lo estudié toda mi vida, y casi no termino mi Licenciatura en Filosofía por los exámenes desaprobados de Latín y Griego. Por ende, tampoco leo siquiera el Alemán, lo cual para filosofía es algo terrible. Me verás hablar muchas veces de los filósofos alemanes que más conozco (Kant, Husserl, Heidegger), pero no tengo ningún artículo académico sobre ellos porque, y me parece bien, las revistas especializadas sólo admiten las citas en el idioma original. Y está bien. Precios que hay que pagar por ser un ADD.

¿Y el Español? Ja ja sí, es mi lengua materna pero no pronuncié una sola palabra hasta los tres años……………………………………….

Pero toda esta confesión de discapacidad me viene bien para explicar mi asombro. Mientras leía (con gran placer, como siempre) la lógica insuperable de Kant, ojeaba el original alemán. Reparé por un momento mi experiencia de no entender absolutamente nada (bueno, conozco algunos términos técnicos, como lebenswelt, dasein y olvíden-sen 😊) y esa experiencia de NADA me dejó pasmado. La ignorancia total de la otra lengua era una experiencia de la nada. Y eso me hizo caer en el abismo del milagro del lenguaje. El lenguaje es un milagro de evolución, algo ante lo cual los mamíferos superiores deben tener una terrible experiencia. Ellos intentan hablar como los humanos pero no pueden. Están como nosotros ante una lengua que ignoran, pero no tienen siquiera una que hablan. Lo sé por mis conversaciones con mi gatita. Cómo ella articula, entona, me mira, acompaña con el cuerpo, es hablar, sí, pero está como alguien que ignorara todas las lenguas. Como cualquiera de nosotros en una situación de ser extranjero total: gestos, intentos, y la desesperación de NO poder, de no saber nada (el misterio de la doble negación del Español). Terrible…………………

¿Y cómo es que hablamos aunque sea una lengua? Ja ja nadie lo sabe. Sí, está lleno de teorías filosóficas y neurológicas sobre la posibilidad del lenguaje, pero certezas…. Hay nada como la lengua que ignoramos. Está lleno en youtube de vendedores de humo sobre la enseñanza de las lenguas, y la pura verdad es que cada uno aprende lo que puede y como puede, y lo demás son consejos, ayudas, ánimos, pero nada más. (Eso es así en todo....). Hay gente honesta que te ayuda en ese casi imposible intento, y otros medio deshonestos que te dicen que te lo van a hacer fácil y que esta científicamente comprobado que, ja ja, por favor……………………..

La única certeza es que estamos creados a imagen y semejanza de Dios, que es Logos, que es la Palabra, hecha carne además, y que nuestra espiritualidad nos permite participar levemente en ese “decir el ser”. Pero eso es todo. Nada más, nada menos. Nada menos porque nuestra comunicación humana es fruto de una inteligencia espiritual que al captar los sentidos universales los puede llevar a otros por medio de un cuerpo que le es proporcional. Nada más porque cómo logramos eso, no sabemos y no lo sabremos nunca con certeza. Qué sucede en el maravilloso cerebrito del niño que escucha y aprende, Dios lo sabe. El adorable cerebrito de mi gatita también escucha (porque mi esposa y yo le hablamos todo el tiempo), y está aprendiendo, se nota: nos mira, nos entiende, nos responde, imita los tonos, y hasta entiende el lenguaje indexical. Pero no podrá, no podrá hablar. Gracias a Dios no tengo la tentación de Miguel Angel de golpear a su estatua y gritarle por qué no hablas, porque la gatita no es mi creación, es una maravillosa obra de Dios que miro con admiración y de la cual no soy dueño en absoluto, más allá del tecnicismo jurídico de ser humanamente el dueño, un mero pacto jurídico del cual no hay que abusar ni creérselo en absoluto.

Pero bueno, volvamos al lenguaje. Ese misterio. Cómo estoy escribiendo esto, otro misterio, otro misterio de casi imposible perennidad, porque lo que escribo tiene un sentido en sí mismo que se suelta de mí y queda abierto a otro misterioso acto de comprensión tal vez siglos más adelante, cuando yo sea nada pero lo escrito quede con un sentido potencial que pasará al acto por otro ser inteligente cuya inteligencia será, precisamente, comprender.

Que Dios nos mantenga abiertos al misterio del lenguaje. Si el lenguaje es la casa del ser (Heidegger. ¿Lo habrán traducido bien?), y el ser finito surge de la nada, porque crear es dar el ser de la nada, asombra menos que hablar sea saltar el abismo de la nada. Y eso participa del misterio de la creación. No permitas que te anulen el misterio. Tal vez sea la única posibilidad de comprenderlo.

2 comentarios:

Asociaciòn Cortázar dijo...

Muy interesante la nota. Al Dr. Cortazar le hubiera interesado leerla, porque se dedicó bastante a estudiar los lenguajes, sobre todo algo que, aunque no le dio ese nombre, podrìa considerarse la "intraducibilidad" desde una lengua aborigen (ab-origen) a las nuestras actuales.

Gabriel Zanotti dijo...

Totalmente................... Ya no sabía como meter ese tema, pero esa intraducibilidad es un signo claro del misterio del lenguaje...................................... La traducción es otro milagro: es aproximar un juego de lenguaje a otro......................