martes, 15 de mayo de 2012

SAN JOSÉ ERA EMPRESARIO, CAPITALISTA, PROPIETARIO, PRODUCTOR Y MIEMBRO FUNDADOR DE LA ASOCIACIÓN NAZARETIANA DE DIRIGENTES DE EMPRESA

Después de haber visto muchas de las airadas, asombradas y enojadas reacciones de mi entrada inicial sobre el tema, he "probado" :-) que he tocado los prejuicios más arraigados del marxismo cultural que nos rodea. Game over.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

¿quien se enojó? ¿¿??

Anónimo dijo...

En lo único que coincido es en el marxismo cultural reinante , por lo que alguna vez fui criticado en tu blog . El resto , empezando por la analogía , es por lo menos dudoso . Lo que tengo claro luego de ver miles de estas discusiones inconducentes es que al fuego no se lo combate con nafta . La incoherencia a la que llevan las disyuntivas excluyentes de esto "o" aquello es separar en el análisis algo que nunca estuvo separado . Entonces aparece lo de profundizar las contradicciones y fogonear la lucha de clases . Un despropósito que está inconscientemente en muchos . Demasiados .
Lo que se necesita es menos profundización de las contradicciones que llevan a la confrontación y más profundización de las coherencias que llevan a la unión . Menos análisis y más síntesis . Porque el auténtico empresario es siempre el mejor obrero de su empresa , el auténtico general el mejor soldado de su ejército y el auténtico maestro el mejor de los alumnos . Que hoy haya crisis de autenticidad es otro asunto .
Pero cuidado con las formas cortantes del tipo "game over" ya que no guardan coherencia con "el paradigma del no paradigma", concepto que se supone es lo opuesto al dogma y al autoritarismo . El verdadero juego nunca termina . Lo incluyente no puede ser excluyente , cerrado o terminado . M.S

Anónimo dijo...

Ok, pero cuidado también con las sintesis tramposas. No necesariamente un general sería "el mejor soldado de su ejercito", ni un auténtico empresario "el mejor trabajador de su empresa" ni un auténtico maestro el "mejor de los alumnos". Y subrayo lo de NO NECESARIAMENTE.

Anónimo dijo...

Esa es precisamente la crisis de autenticidad entre lo que debería ser y lo que es . El empresario corrupto , por ejemplo , que cuando le va mal se pone bajo el ala del estado es un ejemplo claro . Esto le da pie o argumentos al confrontador marxista . En nuestra cultura mucho más que en otras . Y los argumentos no son tramposos , son equivocados o acertados . Son las personas las tramposas . M.S

Anónimo dijo...

Cierto: debí decir "síntesis confusas". No me atrevo a usar "equivocadas" porque no termino de ver el sentido exacto de las palabras "auténtico" y "mejor" en ese contexto. Concuerdo, eso sí, con el concepto de profundizar "las coherencias que llevan a la unión", mientras se lleve realmente a la práctica y la cuestión no quede en una retórica vacía que luego los hechos desmienten.

Anónimo dijo...

La responsabilidad de profundizar las coherencias es : primero del estado y su eventual gobierno ; segundo de los grupos empresariales que arriesgan el capital y dan empleo ; tercero de los trabajadores manuales e intelectuales libres que queden . Todos ciudadanos iguales ante la ley pero en este orden de responsabilidad . Que la cuestión no quede en retórica entonces guarda también este orden .
Auténtico es ni más ni menos que sea del oficio o profesional . Que haya hecho su carrera desde abajo y nunca deje de ser el operario Nº1 . Es muy común ver en Alemania o Japón al dueño de una empresa desempeñar temporariamente el trabajo de cualquiera , porque lo sabe hacer , para no perder el contacto con la realidad y porque corresponde . Acá es raro . Pero guarda coherencia cultural con empleados con tendinitis por pasar una tarjeta o sindicatos que exigen tres meses de reposo por una torcedura de tobillo . Un empresario auténtico no es un testaferro . Un empresario que se asocia al estado para no fundirse también deja de ser auténtico . Ni hablar de los que lo hacen para enriquecerse , que es hacerlo a costillas de todos nosotros . El asimilado por el estado ya no corre riesgos , su proyecto deja de ser el propio . Un empresario auténtico no recluta esclavos . Más que empleados tiene asociados en las ganancias y no confunde su patrimonio con el de su empresa . Concluyendo , aquí hay muy pocos auténticos empresarios , por el asunto cultural de fondo tan tremendamente arraigado y porque desde el poder del estado poco se ha hecho en todos los gobiernos que han pasado para dar una seguridad jurídica similar a la de países como Brasil , Uruguay , Chile , Colombia o Perú . Por lo tanto los capitales huyen como habitualmente se dice . M.S

Anónimo dijo...

Imposible no coincidir con tu visión, M.S., aunque me pregunto si la misma no será un tanto idílica. Más allá del empresariado argentino que es un desastre (en perfecta sintonía con el movimiento sindical, como bien señalás) me pregunto si esa visión del empresariado extranjero no estará un poco fuera de la realidad. No tengo la experiencia de haber tratado con empresarios alemanes o japoneses. Sí con norteamericanos, y si bien el trato y la concepción empresarial es abismalmente mejor respecto a la de aquí, tampoco es que haya conocido a ese "superempresario" capaz de realizar con solvencia cualquiera de las tareas de su empresa. No digo que no los haya, por suepuesto, si no que son mas bien excepciones.

Anónimo dijo...

Más bien es la Argentina la que se está quedando fuera de la realidad antes que quien escribe o los empresarios alemanes que conozco . Probablemente en las megaempresas sea excepcional este empresario-obrero , pero no lo es en las medianas y chicas . En Argentina las pymes representan el 99% de las empresas y generan el 70% del trabajo y un 42% de las ventas totales . La mayor parte empresas agropecuarias familiares o relacionadas con el sector . Aquí quien no es todoterreno , lo que implica manejar herramientas , animales , soldar , construir , etc , no sobrevive . Por eso creo que son pocos , pero no excepcionales . Es el fenómeno equivalente al "self made man" que emergerá si alguna vez disminuye la carga tributaria . M.S

Anónimo dijo...

Ok, ahora sí ya te entendí con toda claridad. En cualquier caso, no me parece tan importante como virtud de un empresario poder desempeñarse con solvencia en cualquier área de su empresa (el que lo pueda hacer, pues mucho mejor, claro) pero SI me parece muy importante otro de tus conceptos: Y por supuesto, otro de tus conceptos: "Un empresario auténtico no recluta esclavos . Más que empleados tiene asociados en las ganancias". O sea, ser capaz de valorar el trabajo de quienes lo hacen para él. Y si
a eso le sumamos la vocación, la visión y el talento para ser empresario (o emprendedor), creo que con eso ya alcanza.

Otro cantar es ya como llegamos a ese modelo ideal. Comparto que el problema es cultural, y si bien el estado es responsable, el gobierno de turno finalmente expresa a la sociedad de su tiempo, de modo que el cambio debe darse primero en la sociedad. ¿El idilíco ahora seré yo? Saludos!