domingo, 4 de agosto de 2013

UNA PREGUNTA A LOS ANARCO-CAPITALISTAS.


La pregunta no es mía, se la escuché a Ezequiel Gallo creo que en el 85 u 86 en el Departamento de Investigaciones de Eseade, que él dirigía. (Yo era muy joven y era tan tonto que pensaba que me iba a jubilar en ese Departamento…..)

Pero la voy a reformular. A pesar de los años ya transcurridos y el abundante debate sobre el tema, no he encontrado respuesta.

Supongamos que fundamos un country, o una free-city, con todo absolutamente privado, sin interferencia de ningún estado, intentando la plena vigencia del principio de no agresión.

Cada uno de sus habitantes tendría su propiedad, desde luego, y habría algunos bienes públicos privados libremente decididos en el acto fundacional. El country tendría una administración para los bienes públicos privados que pudiera haber, y obviamente todos habríamos decidido libremente pagar las cuotas de mantenimiento de esa administración en común. Habría desde luego libre entrada y salida de bienes y de personas.

Vuelvo a decir, todo sería totalmente privado. Tal vez, como en las circunstancias actuales muchos estatistas querrían invadirnos, uno de los bienes públicos privados podría ser una defensa en común contra una eventual invasión externa a gran escala. El que no quiera pagar esa cuota, que no la pague, aunque habría que ver si comenzarían a cumplirse las predicciones sobre ese free rider ya muchas veces analizadas.

Supongamos que pasa el tiempo, todo anda bien, nadie nos invade y ya han pasado tres generaciones. Supongamos que yo hubiera nacido en la casa de mi abuelo, quien fuera uno de los propietarios/fundadores del country. Supongamos que, esgrimiendo el principio de no agresión, yo no quisiera pagar más la cuota de mantenimiento. Ok, me podrían decir los actuales miembros de la administración: nadie obligó a su abuelo a estar aquí. El vino porque quiso y porque quiso acordó, junto con todos los demás, en iguales condiciones, que hubiera este sistema de bienes públicos privados, llamados club-goods, y que respetan totalmente el ppio. de no agresión, porque nadie inició la fuerza contra su abuelo. Pero resulta que usted ha nacido en su propiedad y por ende el principio se traslada transitivamente. Nadie lo obliga a estar aquí. Puede irse.


Ok. La pregunta es: ¿qué diferencia habría con un estado liberal clásico, con total libre entrada y salida?

4 comentarios:

Ignacio Clancy dijo...

Está muy buena la pregunta. Ahora mi duda es, ¿por qué habría una administración de los bienes públicos privados?, ya que los mismo podrían ser provistos por un individuo o una empresa y así no habría ningún pago de administración, solo se pagaría cuando se consume, o se financiaría a través de terceros (estoy pensando en una plaza en la que no se page entrada, pero el negocio sea la publicidad). Otra duda es ¿porque suponemos que un estado tiene más derecho que un individuo? SI el alguien nace en esa propiedad como mencionas ¿por qué debería irse si no paga? ¿Porque tiene que renovar el contrato y sino irse si él es dueño de su propiedad y no quiere consumir nada de ese “estado”?
En resumen, el planteo que haces muy bueno por cierto, me resulta más a un estado liberal clásico (como vos decís) que al buscado por los anarco capitalistas? En este sentido (en el ejemplo que planteas) no encuentro diferencias con un estado liberal clásico, si (y bastantes) con un anarco.

Fernando Pereyra dijo...

Me parece que en el caso de un escenario de Estado liberal clásico, ante una diferencia de criterios podés OBLIGAR a la administración del country/ciudad a resolver la cuestión en la justicia (más allá de quien tenga razón). En un escenario ancap creo que no sería posible.

Anónimo dijo...

Ninguna en lo que planteas . Es un caso para la justicia arbitral privada del country ( justicia privada que ya existe hoy como complemento de la j. ordinaria ) . Que no te obliguen a estar en un sitio no significa que te obliguen a irte o viceversa , pero si decidís quedarte , es porque aceptás las reglas . No hay coacción , es tu elección seguir perteneciendo o no , cumplir o no las reglas . Que vos o tu abuelo hayan hecho las reglas es una anécdota . Las diferencias del ac con el lc están en la justicia penal , que es un tema que deben manejar bien dos personas y no soy una de ellas . El ac es sólo inexistencia de un megapoder central en el marco de reglas-leyes libremente aceptadas para pertenecer a un grupo autónomo determinado . Funcionaría en ciudades chicas y cualquier megapolis conspiraría contra su implante . Más que una ideología es un estilo de vida propietario , basado en dos principios originados más del anarquismo que del liberalismo : la propiedad de uno mismo y el principio de no coacción . Pero es ingenuo pensar en el ac como un laissez-faire , donde no se pagan impuestos o no se responde por delitos , sólo por llamarlos "cuotas" o "conductas antisociales" . Aquí rige aquello de que a mayores derechos , mayores obligaciones . M.S

Anónimo dijo...

Gabriel, te he puesto en mi blog Realismo liberal. También mi filosofía unifica aspectos del liberalismo en sentido libertario y el realismo.
Enhorabuena y estamos en contacto
Abrazos
Antonio Muñoz Ballesta: realismo liberal