Ultimamente, el tema del “patrón oro” ha vuelto a estar en el tapete, con el reconocimiento de ciertas autoridades monetarias internacionales de que habría que volver “de algún modo” a él. Yo entonces reivindiqué la propuesta de Mises y algunos me dijeron que era impracticable. Tal vez la confusión radica en que la propuesta de Mises no tiene que ver con Bretton Woods. Ante todo, hay que leerla. Aquí está:
http://mises.org/books/Theory_Money_Credit/Part4_Ch23.aspx
En resumidas cuentas, Mises proponía que el oro volviera a ser usado libremente como moneda, no que los gobiernos se basaran en él para garantizar su papel moneda. Esto es, había que establecer un mercado libre de oro en el cual los ciudadanos norteamericanos pudieran volver a intercambiar sus dólares por oro y luego privatizar totalmente el sistema bancario de modo tal que éstos volvieran a ser casas de depósito de oro emitiendo los recibos de depósito correspondientes, con una reserva del 100% (cosa que algunos consideramos como una política de transición). Obviamente, si ello se hiciera ahora, los mercados libres se encargarían de ofrecer todo tipo de sustitutos monetarios: tarjetas de débito con transferencia internacional, etc.
Por lo demás, esto no es cuestión de “decidirlo”. El mercado ya ha decidido por el oro. Los órdenes espontáneos no esperan a los órdenes deliberados. En el final del gobierno de De la Rúa, los consumidores argentinos ya demandaban más dólares que pesos. La devaluación del peso ya había sido decidida por el propio mercado. De igual modo, el dólar ya se está depreciando frente al oro, mientras Bernanke y Obama se sigan encargando de llevar a los EEUU a una catástrofe monetaria nunca vista antes. El problema es que por ahora lo habitual es comprar oro como opción futura para venderlo luego por otra moneda, cuando en realidad, la privatización del sistema bancario y sobre todo la eliminación del banco central permitirían utilizar el oro y sus sustitutos como moneda habitual en el intercambio nacional e internacional, e impediría que cualquier otro gobierno se embarque en locuras tales como las que la FED está haciendo en estos momentos.
Lo impracticable no es el oro, sino los bancos centrales y su fraude legalizado permanente.
Me quedo con la frase final y creo que está aún vigente :
ResponderEliminarSin embargo , sólo tenemos la elección entre dos utopías: la utopía de una economía de mercado, no paralizada por los sabotajes del gobierno, por una parte, y la utopía totalitaria de la planificación integral por el otro. La elección de la primera alternativa implica la decisión en favor del patrón oro .
Para esta conclusión de Mises diría que hace falta una masa crítica de personas libres que se exprese en las urnas y haga viable el proyecto . En EEUU tal vez en el futuro ( cuando hagan crack en serio ) , aquí soy muy pesimista porque nunca terminamos de salir de la miseria y la marxista es la utopía más a mano . Sin embargo pudimos ver en estos últimos años de "viento de cola" que hay intervencionismos e intervencionismos . No es igual Venezuela , Bolivia , Ecuador o Argentina , que Uruguay , Chile , Brasil o Colombia .
Tendrías que explicar más otras políticas de transición ( para otra entrada ) , y así poder ir más allá de la necesaria denuncia ( en este caso , Obama y la FED ) , de las utopías , y ver que se puede hacer hoy para ir desactivando el fraude de los Bancos Centrales , considerando el triunfo posguerra del paradigma intervencionista . Abrazo . M.S