domingo, 27 de junio de 2010

SUPONGAMOS QUE KIRCHNER PIERDE, por Alejandro Sala

Publicada 21/06/2010 en . © www.economiaparatodos.com.ar


Empiezan a percibirse síntomas de que las fuerzas de oposición avanzan en su organización como alternativa política. ¿Qué escenario general y particularmente económico podría esperarse si el kirchnerismo fuera desplazado del gobierno?
Las fuerzas de oposición han avanzado bastante en su organización en las últimas semanas. La cuestión que era una preocupación –quién podría configurar un proyecto que pudiera desalojar al kirchnerismo del gobierno en 2011- empieza, incipientemente, a encontrar una respuesta. Se ha producido además un hecho no demasiado relevante en sí mismo pero de gran significación simbólica: la apabullante derrota del sector filo-kirchnerista en la elección interna del Partido Socialista. El socialismo no es un partido muy numeroso pero tiene una profunda identificación con la corriente ideológica a la que el kirchnerismo representa. A pesar de eso, el 90 % de sus afiliados se inclinaron por apartarse del gobierno. Esto demuestra que a los Kirchner no los apoyan ni siquiera los que coinciden ideológicamente con ellos.

Si este proceso avanza y se consolida, es un hecho que, en 2011, afortunadamente, los Kirchner dejarán el gobierno. El interrogante que se plantea, por lo tanto, es: ¿y a partir de entonces, qué? Seguramente, las próximas elecciones no serán ganadas por un nucleamiento que sea partidario de la plena aplicación de la economía de mercado. Lamentablemente, el pueblo –en contra de sus propios intereses- no votará en favor de una propuesta de orientación genuinamente liberal. A pesar de eso, es probable que la situación general mejore.

Por lo pronto, es seguro que el próximo gobierno va a tener un perfil mucho más democrático que el del kirchnerismo. Un factor determinante para que el actual gobierno esté perdiendo adhesiones es que sus métodos autoritarios no concuerdan con los sentimientos mayoritarios de la población, que aspira a que la convivencia encuadre dentro de los parámetros de la democracia. El perfil intolerante del matrimonio Kirchner –que en el caso de ella es mucho más acusado que en de él, aunque él es el ideólogo- es un factor determinante en la pérdida de consenso del actual gobierno.

Pero la cuestión que despierta los mayores interrogantes está referido a cuál sería el rumbo de la economía post-kirchnerista. Lo ideal sería que se aplique un plan basado en el libre mercado pero eso es inimaginable porque no hay consenso político para semejante iniciativa. Quienquiera que gane las próximas elecciones, la economía tendrá un sesgo intervencionista por la sencilla razón de que quien no reivindique dicha posición no ganará las elecciones.

Pero si uno de los rasgos de la política que se viene es un mayor grado de democratización, en contraste con los rasgos autoritarios del kirchnerismo, eso repercutirá en un menor grado de intervencionismo que el actual. Es bastante probable que pasemos del intervencionismo autoritario aplicado actualmente por los Kirchner (y representado por Guillermo Moreno) a algún tipo de “intervencionismo consensuado” donde los alcances y las formas del intervencionismo estatal sea definido de común acuerdo entre las partes interesadas. Por supuesto, esto traerá aparejadas interminables controversias y el resultado de todas las gestiones que se hagan será absolutamente incierto y, además, precario, porque está en la naturaleza de las cuestiones económicas que todos querrán un poco más de “torta” de la que tengan asignada y, entonces, surgirán los conflictos.

Es probable que haya matices en la política económica según quien sea el vencedor en las elecciones. No sería lo mismo un peronista que un radical y no sería lo mismo, por ejemplo, Reutemann que Solá ni Ricardo Alfonsín que Cobos. Es probable que el peronismo, que es un partido menos ideologizado –es decir, más pragmático, con todo lo que eso pueda tener de bueno o de malo según las circunstancias- sea más proclive a un menor grado de intervencionismo, no por convicción sino por tener más percepción para comprender los problemas que el intervencionismo desmedido traerá aparejados. Además, es legítimo creer que si el candidato peronista electo presidente fuera Reutemann, será un poco menos intervencionista que otros candidatos justicialistas. Del mismo modo, si el ganador de las elecciones fuera un radical, es probable que Cobos sea un poco menos intervencionista que Alfonsín. Estas especulaciones están basadas en los perfiles que cada uno de los pre-candidatos respectivamente presentan y, sin dudas, la forma en que se resuelvan muchas de estas cuestiones dependerá de las circunstancias concretas en las que el próximo gobierno deba operar.

Es improbable que la situación económica en general empeore con el alejamiento de los Kirchner del gobierno y es posible que mejore un poco, en particular, en el sentido de que se reduzcan los índices de inflación y que haya algo más de seguridad jurídica, al menos en sus trazos más gruesos. No es imaginable que un gobierno con un perfil más democrático incurra en los abusos desenfrenados que vienen crecientemente caracterizando al gobierno kirchnerista. Esos hechos le darán a la economía algo más de certidumbre, siempre, por supuesto, dentro del margen de imprevisibilidad que es característico de Argentina. Pero, al menos, no habrá espacio para los abusos más desmedidos porque el costo político de las decisiones más visiblemente arbitrarias desalentará al gobierno a incurrir en ellas.

Y un punto importante es que el clima general que cabe esperar probablemente sea más distendido, con mayor margen para debates con un espacio creciente para la racionalidad. Esto, naturalmente, no será un proceso rápido ni lineal –estará plagado de vacilaciones, contramarchas, desviaciones y demoras- pero, eliminados los abusos flagrantes y lindantes con la violencia que el kirchnerismo aplica, está en la propia naturaleza de los acontecimientos que los ánimos se serenen y las posiciones radicalizadas se moderen. En ese contexto, comenzarán a aparecer los espacios para revalorizar los principios económicos sanos, que producen resultados prácticos beneficiosos para el progreso general y la elevación del nivel de vida de la población. Es bastante probable que todo esto suceda de manera espontánea y, aparentemente, sorpresiva, aunque aquí estamos anticipando esa hipótesis, no porque seamos videntes sino porque las condiciones sociales tienden a la aparición de las condiciones para que algo así suceda.

Todo esto, naturalmente, depende de que Kirchner pierda en las próximas elecciones. Pero esa eventualidad empieza a dejar de ser una expresión de deseos y comienza a cobrar cuerpo, a partir de los avances en la organización de las corrientes opositoras. Por lo tanto, es pertinente un análisis preliminar de ese escenario imaginario. Con el transcurso del tiempo se irán “aclarando los tantos” y se podrá evaluar el tema con mayor precisión.

domingo, 20 de junio de 2010

SOBRE LO OPINABLE EN LA IGLESIA, UNA VEZ MÁS

Publicamos hoy un comentario realizado en el Instituto Acton el 19 Julio 2005 (http://www.institutoacton.com.ar/editoriales/editorial2.htm). Lo reiteramos ahora precisamente una semana después de la entrada del domingo anterior. A buen entendedor, pocas palabras.
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¿Qué es lo opinable? (19 DE JULIO 2005)
por Gabriel Zanotti

Parece que no son tiempos para hablar de lo opinable. Para dar ejemplos de temas que en la Iglesia no son opinables, Benedicto XVI ha dicho, para asombro –o enojo- de muchos, que el matrimonio es entre dos sexos diferentes (varón y mujer, por si hay alguna duda). Para dar otro ejemplo, Juan Pablo II tuvo que decir, en la Veritatis Splendor (1993), a todos los obispos de la Iglesia Católica, que el pecado se divide en mortal y venial....

Pero en el editorial pasado nosotros terminamos diciendo que el Acton Institute se mueve la mayor parte de las veces en temas “opinables”. ¿Qué significa eso? Si nos permite el lector, daremos nuestra opinión...

Los católicos tienen un ámbito de cuestiones no opinables que constituyen el “depósito de la fe”. Las Sagradas Escrituras, la Tradición y el Magisterio de la Iglesia constituyen las fuentes de la Revelación que se cree por la Fe: analógicamente, aquello que es la misma persona de Cristo asentado en nuestra vida por la Gracia.

En ese sentido hay cosas que son “de Fe”. Las decimos cuando decimos el “Credo”.
Pero el Credo no dice, por ejemplo: “creo en Dios, Padre Todopoderoso, y en la ley de gravedad”. No. Tampoco en la ley de la oferta y la demanda. ¿Por qué? ¿Acaso porque sean falsas? ¿O acaso porque tenemos que mirar con sospecha a todo aquello que no sea sagrado, que no forme parte del orden sobrenatural de la Gracia?
No, ni una cosa ni otra. Sencillamente el credo no dice eso, porque esas cosas no fueron reveladas. Y no fueron reveladas porque la revelación es de aquello que es necesario para la salvación. Ahora bien, el mundo creado por Dios, tanto natural como humano, es esencialmente bueno, precisamente porque está creado por Dios. Pero no todo lo creado por Dios ha sido revelado por Dios.

En las cuestiones sociales, hay tres elementos que no forman parte de la revelación y sin embargo forma parte de las premisas que asumimos sin darnos cuenta en los debates sociales. Ellos son: a) la evolución de determinadas teorías y-o ciencias sociales en determinado contexto histórico (por ejemplo, la teoría de la democracia constitucional); b) la evaluación de determinado contexto histórico a la luz de las teorías anteriores (por ejemplo, “hay naciones donde la democracia es apenas incipiente”); c) juicios prudenciales, concretos, sobre cursos de acción (por ejemplo: “habría que fortificar la democracia en América Latina”). Esos supuestos no forman parte del depositum fidei (el deposito de la Fe) y sin embargo partimos de ellos las más de las veces en cuestiones sociales. Por eso las conclusiones emanadas a partir de ellas son opinables en relación al depósito de la Fe, aunque desde el punto de vista del “orden natural” podamos tener certeza en nuestros juicios. Pero, ¿no es que lo Sobrenatural debe abarcar todo lo natural también, porque, actuando la Gracia de Dios, lo Sobrenatural supone lo natural y lo eleva? Si. Por supuesto. Pero ello sucede cuando los fieles –y especialmente los laicos- santifican todo ello con su acción cotidiana, especialmente en el mundo social, al estar esa acción inspirada en la Fe, la Esperanza y la Caridad. De ese modo lo Sobrenatural, en el mundo social, supone lo natural y lo eleva. Pero ello no borra la justa autonomía de las realidades terrenas, realidades en las cuales los fieles pueden equivocarse, y ese error los compromete a ellos, no a la Iglesia.

De ese modo, la Fe llega a todos lados, si, pero a las cosas que no son “de Fe” llega a través de la acción de los fieles laicos, que tienen legítima libertad de opinión en esos temas (CDC 227) mientras no contradigan, claro, a la misma Fe. Por eso dice el Vaticano II: “Muchas veces sucederá que la propia concepción cristiana de la vida les inclinará en ciertos casos a elegir una determinada solución. Pero podrá suceder, como sucede frecuentemente y con todo derecho, que otros fieles, guiados por una no menor sinceridad, juzguen del mismo asunto de distinta manera. En estos casos de soluciones divergentes aun al margen de la intención de ambas partes, muchos tienen fácilmente a vincular su solución con el mensaje evangélico. Entiendan todos que en tales casos a nadie le está permitido reivindicar en exclusiva a favor de su parecer la autoridad de la Iglesia. Procuren siempre hacerse luz mutuamente con un diálogo sincero, guardando la mutua caridad y la solicitud primordial pro el bien común...” (Nro. 43).

Nada de esto es sencillo. Conviene, sí, no olvidarlo, para ejercer nuestro derecho a la libertad de opinión en material temporal, para respetar absolutamente al católico que no piense como nosotros en el mismo tema, para no comprometer a la Jerarquía de la Iglesia en materia contingente, y para respetar al Magisterio de la Iglesia en las cosas que le son propias.

domingo, 13 de junio de 2010

SOBRE EL DISCURSO DE BENEDICTO XVI A LA ACADEMIA PONTIFICIA DE CIENCIAS SOCIALES

(Publicado en www.institutoacton.com.ar)



El pasado 30 de Abril, Benedicto XVI dirigió un discurso a la mencionada academia pontificia, que fue titulado, por L`Osservatore Romano, como “Sin intervención pública y criterios morales el mercado no puede autorregularse”(1). El párrafo más significativo al respecto es, creemos, el siguiente: “…El colapso financiero internacional en todo el mundo, como sabemos, ha demostrado la fragilidad del sistema económico actual y el de las instituciones relacionadas con él. También ha demostrado el error de la hipótesis según la cual el mercado es capaz de autorregularse, independientemente de la intervención pública y del apoyo de los criterios morales interiorizados”. Este párrafo será interpretado, seguramente, como un apoyo decisivo a quienes piensan que el mercado libre es la causa de la crisis financiera internacional, desafiando a quienes pensemos lo contrario a contradecir a Benedicto XVI.

No pensamos contradecir nada, primero porque, seguramente, es lo que efectivamente Benedicto XVI piensa, y no pensamos desmentirlo. Segundo, porque esta vez no debatiremos sobre los términos, o sea, qué es mercado libre y qué no. Porque si lo que se nos propone es una especie de refutación experimental en ciencias sociales, procedamos según dicho método. Si el colapso financiero es un resultado no esperado de determinada política económica, la cuestión es ver cuál ha sido esa política económica en cuestión. Y como sabemos –para utilizar la expresión de Benedicto XVI- hace ya décadas que las políticas económicas de EEUU y Europa son fuertemente activas en la regulación, por parte de los bancos centrales, de la oferta monetaria y de las tasas de interés, especialmente después del éxito académico de Keynes en 1936. Dejo a los lectores y a los miembros de la Academia Pontificia si a eso lo quieren llamar mercado libre o no; como estamos diciendo, no nos vamos a pelear por los términos. Lo interesante es saber que los economistas austríacos más importantes, Mises y Hayek, siempre han estado en desacuerdo con dichas políticas económicas y han propuesto otras, previendo precisamente que las intervenciones de los bancos centrales en la oferta monetaria iban a conducir a este tipo de crisis. Así lo explicó Mises por primera vez en 1912 (2), para luego sistematizar su teoría del ciclo en 1949 (3), en su tratado de economía, donde criticó fuertemente al FMI (4). Mises realizó años después, en 1952, una propuesta de mercado libre monetario basado en el patrón oro (5), y Hayek, que lo seguía en estos temas, propuso para Europa, en 1976, una competencia de monedas (6). Ninguna de las dos propuestas fueron seguidas por las autoridades monetarias occidentales; es más, fueron sistemáticamente ignoradas por el Fondo Monetario y el Banco Mundial.

Por lo tanto, si vamos a basarnos en la experiencia, con toda la carga de interpretación que ella tiene, tendríamos que decir que las políticas económicas que precedieron largamente al colapso monetario actual fueron, precisamente, lo que Mises y Hayek consideraron un profundo estatismo monetario, mientras que sus propias propuestas de mercados libres monetarios fueron ignoradas en absoluto. ¿Podemos inferir entonces que la crisis fue producto de un “mercado libre”?

Dejo a los lectores la respuesta.

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(1) En L`Osservatore Romano del 9-5-2010, nro. 19, p. 12.
(2) Mises, L. von: The Theory of Money and Credit (1912); Liberty Fund, 1981.
(3) Mises, L. von: La Acción Humana (1949); Sopec, Madrid, 1958, cap. XX.
(4) Op. Cit., cap. XVII, 19, p. 591.
(5) Mises, L. von, The Theory of Money and Credit, op.cit., part 4.
(6) Hayek, F. A. von: Desnacionalización de la moneda (1976); Fund Bolsa de Comercio, Buenos Aires, 1980.

domingo, 6 de junio de 2010

CURSO DE FILOSOFÍA PARA PROFESIONALES

ELEFE SE RENUEVA

Filosofía para profesionales

Desde el 2006 hasta la fecha, ELEFE ha sido una alternativa al sistema formal de enseñanza. Sin pretender sustituirlo, sencillamente porque por ahora es jurídicamente imposible, sin embargo hemos hecho lo posible por crear un ambiente familiar, amistoso, serio y desacartonado a la vez, donde todos han podido expresarse, aprender y estar libres de los temores y presiones del sistema formal.
Sin dejar de lado estas reuniones, daremos un nuevo paso. Siempre he tratado, dentro del sistema formal, de abrir la filosofía para todos, tratando de programar post-grados en filosofía para profesionales de diversas carreras. Las tres veces fue imposible: el sistema formal es demasiado rígido y no quiero entrar en detalles que atentarían contra la caridad :-). Sólo quiero volver a decir que, en una sociedad abierta, respetuosa de las libertades individuales, cada uno estudia lo que quiere con quien quiere, tiene los títulos que su esfuerzo y libertad le otorgan, corre los riesgos respectivos y nadie impide a otros recorrer ningún camino. Menos aún con la filosofía: todos los seres humanos son filósofos; mi vida entera ha sido un llamado a despertar a los filósofos dormidos, a tomar la pastillita roja…

Ahora, sencillamente, en la paz y en la libertad de mi hogar, en la amistad del diálogo, en la calidez de la comprensión y estímulo al que quiere despertar al filósofo que lleva dentro, voy a ofrecer cursos de filosofía sistemáticos, una vez por semana, para profesionales y para cualquiera que quiera aprender. Sin pila, sin cable, sin temores, sin exámenes más que la existencia auténtica, sin títulos más que la propia seriedad de la vida y el prestigio del propio estudio. Ideal para quienes están más o menos en la mitad de la vida y miran con nostalgia la filosofía que no pudieron estudiar en su momento. Ideal para quienes ya están dentro del sistema formal, que ya tienen su título, y ahora, sencillamente, quieren volver al amor a la sabiduría que siempre llevaron consigo.

Por supuesto, me preguntarán por el contenido de los cursos. Antes que eso, y más importante, es el método, que es un meta-contenido que abarca todos los otros; es, como diría Karl Popper, una actitud más que una teoría. Ese método consiste en la siguiente paradoja: el zanottismo anti-zanottista :-)).

Zanottismo porque, obviamente, yo doy clase desde mí, desde mi propia formación e ideas, que se pueden ver si abren mi CV y observan mi formación, mis escritos, etc. (ver en www.gabrielzanotti.com.ar). Por supuesto, sobre ese tema hay (¡Ay! :-)) dudas. ¿Qué es Zanotti? ¿Tomista, popperiano, hermenéutico, liberal, husserliano, etc., etc., etc.? Yo tampoco tengo la respuesta, así que me pueden ayudar a descubrirla :-).

Pero anti-zanottista porque en mis cursos, aunque yo no lo pretenda, cada uno se ubica en sí mismo y en su carril. Yo lo único que hago es poner a cada tren, a cada uno, en su camino, aunque no sea el mío. A su vez, si alguien camina mi camino, lo hará libremente, por propia convicción, y entonces será su camino también.

Y ello es porque el Zanottismo es un método (nada original, pero sí muy olvidado en el sistema educativo formal) que consiste fundamentalmente en diálogo. En las clases de zanotti (sí, con minúsculas) todo el mundo puede estar en desacuerdo con cualquier cosa que diga zanotti, incluso, con esto último. En sus clases, no hay que saber para opinar, sino opinar para saber. En sus clases, las preguntas son parte indispensable de la planificación de clase. En sus clases, la libertad forma parte esencial del método. Ninguna pregunta molesta, al contrario, lo que molesta es la falta de preguntas. Y si alguien quiere atacar con alguna pregunta, zanotti hace Aikido lingüístico :-)).

Por supuesto, todo esto lo saben mis ex alumnos y ahora amigos (que fueron alumnos porque siempre los traté como amigos), pero si alguien lo duda, try me.

El zanottismo antizanottista incluye otros métodos que se despliegan espontáneamente según aparezcan imprevisiblemente en las previsibles neuronas de zanotti: a) chistes ridìculos, de los cuales uno se ríe por lo ridículo, no por el chiste ; b) reflexiones sobre películas de Woody Allen, películas de Hollywood que supuestamente no dan para nada (o sea, son heideggerianas :-) ) y diversas series de televisión; c) ejemplos con Star Trek, donde ningún ser humano ha llegado nunca, pero zanotti sí :-)) d) reflexiones sobre el Aikido, e) otros imprevistos semejantes :-)).
Este es el valor agregado de mis cursos, a parte de 26 años de resistir al sistema educativo formal.

El zanottismo antizanottista tampoco emite certificados de ningún tipo, coherentemente con el anarquismo libertario descripto :-)) Sin embargo, si alguno quisiera que yo certificara su asistencia a mis cursos (sin ningún tipo de aval estatal, claro) lo acepto, en cuyo caso se pedirá un trabajo monográfico donde el asistente deba someter a crítica el material expuesto.

Pasemos ahora a describir el contenido de los cursos, que serán todos los Martes, a partir del 1er Martes de Agosto, a las 19 hs.
Los temas están abiertos a sugerencias de los alumnos y por ende es una propuesta abierta y modificable sobre la marcha.

1. Introducción al sentido de la historia de la filosofía.
La filosofía NO es un conjunto inconexo de sistemas, sistemas de ideas que parecen haber sido concebidos por gente lunática que tenía los pies en cualquier lado, menos en la Tierra. La historia de la filosofía es el despliegue coherente de la búsqueda de la razón humana por el sentido, y cada período, por ende, tiene un sentido que se explica por el anterior y se proyecta al posterior. La explicación de ese sentido, más que un show erudito de nombres y fechas (para eso tienen infinidad de libros y enciclopedias) es el objetivo de este curso. Esto es, no una “historiografía”, sino el sentido de la filosofía antigua, medieval, etc.
Temas específicos:
1. La filosofía antigua y la metafísica de Aristóteles
2. Los comienzos de la filosofía medieval
3. El apogeo de la escolástica y Santo Tomás de Aquino
4. Renacimiento, modernidad y Renato Descartes
5. Hume y la crisis de la metafísica racionalista
6. Kant I
7. Kant II
8. La metafísica después de Kant
9. Diversos temas de la filosofía contemporánea
10. Un no creyente, Popper
11. Una creyente, Edith Stein.


2. Los temas siempre presentes de la filosofía.
La filosofía, si no es humana, si no es un intento de respuesta a los interrogantes más profundos de la existencia humana, es tan importante como la historia del ping pong (sin menospreciar en absoluto al ping pong ). Por eso estos temas serán dados desde una perspectiva humana y existencial y serán por ende una terapia filosófica.
Temas:
1. Filosofía de la filosofía.
2. La historia de la filosofía
3. Libre albedrío y determinismo
4. Alma y cuerpo, conciencia y objeto, mente y cerebro
5. El conocimiento
6. Conocimiento e interpretación
7. Conocimiento e interpretación II
8. Filosofía y lenguaje
9. Filosofía y lenguaje II
10. Filosofía y sentido de la existencia.
11. ¡Ay Dios!




3. Una inmersión en la filosofía de las ciencias.
Las ciencias parecen estar fuera de la filosofía e inmunes a sus debates y problemas. Por ello el objetivo de este seminario es mostrar que, en el siglo XX, los debates sobre filosofía de las ciencias han sido filosóficos y han llevado a replantear el sentido de las ciencias y re-ubicarlas en la filosofía. Al mismo tiempo, los temas resultantes de este enfoque son tan amplios que implicarán, como corresponde, un planteo global sobre las capacidades del conocimiento humano y la relación entre ciencias, filosofía, religión y política.
Temas específicos:
1. El surgimiento de la ciencia en la modernidad
2. El inductivismo: rígido, amplio, aristotélico.
3. El neopositivismo
4. Popper
5. Popper II
6. Kuhn I
7. Kuhn II
8. Lakatos
9. Feyerabend
10. Feyerabend II
11. ¿Y ahora qué?
12. De la ciencia a la filosofía.

4. Metafísica, fenomenología y hermenéutica.
No asustarse por los nombres. El seminario anterior nos dejará planteadas tres preguntas: ¿hay algo más allá de las ciencias? (metafísica). zanotti dirá: si. ¿Hay una filosofía que camine en el mundo de la vida (fenomenología) y que lo profundice? zanotti dirá: si. ¿Hay algo que esté más allá de la interpretación (hermenéutica) de ese mundo de la vida? zanotti dirá: no. ¿Nos saca ello de la verdad? zanotti dirá: ¡al contrario!
Temas específicos:
1. La metafísica “profunda” en Santo Tomás de Aquino
2. Sus posibilidades, hoy.
3. Husserl y la fenomenología.
4. Husserl y la fenomenología del mundo de la vida.
5. El diálogo con Edith Stein.
6. Heidegger el misterioso.
7. Gadamer y sus horizontes
8. Gadamer y sus horizontes II
9. Wittgenstein y sus juegos de lenguaje
10. Síntesis: el ser en el mundo
11. El ser en el mundo y la interpretación
12. El ser en el mundo y la verdad.


Como se puede ver, cada curso implica un cuatrimestre y, por ende, los cuatro cursos completos equivalen a lo que los sistemas formales llaman post grados pero habitualmente niegan al supuesto “no filósofo”.



Cuestiones “formales” adicionales:

1. Fecha de inicio: martes 3 de Agosto.
2. Hora: 19 a 21.
3. Lugar: casa de Gabriel y Marcela, en Villa del Parque (la dirección será dada después del email correspondiente).
4. Condiciones de ingreso: a) buena onda; b) sentido del humor; c) habitar el Planeta Marte; d), enviar un email a gabrielmises@yahoo.com explicando por qué quiere hacer el curso; e) no olvidar el punto d; f) no olvidar sacar el pasaje de Marte a Villa del Parque con anticipación.
5. Costo, $ 150 por mes.
6. El material de lectura será enviado por email.
7. Cualquier duda o pregunta adicional, enviar un email a gabrielmises@yahoo.com
(NO MEDIANTE EL BLOG).




Acta fundacional de ELEFE en 2006:

ESCUELA LIBRE DE ESTUDIOS FILOSÒFICOS Y EPISTEMOLÒGICOS
Revoluciòn educativa en marcha.

“…Si pensaba en un futuro, soñaba con fundar una escuela, en la que los jóvenes pudiesen aprender sin hastìo y en la que fueran estimulados a plantear problemas y a discutirlos; una escuela en la que no hubiese que escuchar respuestas no deseadas a cuestiones no planteadas; en la que no hubiera que estudiar sòlo por aprobar los exàmenes”

Karl R. Popper.


La Escuela Libre de Estudios Filosòficos y Epistemològicos (ELEFE) abre sus puertas como un especio de estudio y reflexiòn, que pueda hacer frente, de modo quijotesco, a la opresión intelectual de los sistemas formales de enseñanza.

En ELEFE se aprende sin mètodo (Feyerabend), con crìtica (Popper), con teoría (Husserl), con palabra y contemplación (Santo Tomàs). ELEFE no tiene exàmenes, notas, asistencia, cuotas, ni ningún tipo de certificado o aprobación. Se mueve con total independencia de las exigencias del sistema educativo formal y del soviet adicional del sistema formal-estatal. Lo ùnico que ofrece a sus participantes es estudiar. Solamente eso :-).

En breve tiempo ELEFE anunciarà sus primeros cursos, que seràn diàlogos, conversaciones, sobre diversos temas y autores. Gabriel Zanotti es el principal instigador de esta subversión educativa y portavoz de la revoluciòn autèntica. La revoluciòn tiene sòlo una proclama: cualquiera puede estar en contra de lo que diga Zanotti, incluso, con esto ùltimo.

Buenos Aires, Febrero de 2006.